Análisis del Razer BlackShark V2 Pro: sonido profesional y libertad total para jugadores y trabajadores remotos

Con los Razer BlackShark V2 Pro, la marca californiana refina uno de sus auriculares más reconocidos, mejorando aspectos clave como la autonomía, la calidad del micrófono y la conectividad. Aunque su diseño externo apenas varía respecto al modelo original de 2020, esta nueva versión es una auténtica puesta a punto pensada tanto para jugadores exigentes como para profesionales que teletrabajan.

Diseño cómodo y discreto, con algunos matices

A primera vista, el BlackShark V2 Pro mantiene su estética sobria en negro mate o blanco, sin florituras RGB ni líneas agresivas. Es un auricular de gran tamaño, con almohadillas de espuma viscoelástica que resultan cómodas incluso en sesiones prolongadas, aunque puede acumular algo de calor con el tiempo. El micrófono boom es desmontable y ligeramente más corto que en el modelo anterior, lo que mejora su integración estética y funcional.

El conjunto tiene una construcción principalmente en plástico, con bisagras de alambre que, si bien ayudan a reducir el peso (331 g), pueden generar dudas sobre su durabilidad a largo plazo. No se incluye estuche de transporte, así que será importante tratarlo con cierto cuidado.

Conectividad moderna y versátil

Una de las principales novedades de esta edición es la incorporación de USB-C para la carga, sustituyendo por fin el antiguo micro-USB. Además, se suma la conectividad Bluetooth 5.2, que se complementa con el tradicional dongle inalámbrico USB a 2,4 GHz. Esto permite usar el auricular tanto con PC como con PS5 y Nintendo Switch, aunque sigue sin ser compatible con Xbox ni con dispositivos vía cable analógico, ya que no dispone de puerto de 3,5 mm.

Gracias al nuevo botón SmartSwitch, es muy sencillo alternar entre dispositivos Bluetooth y el dongle inalámbrico, así como cambiar entre perfiles de ecualización previamente configurados en Razer Synapse.

Una experiencia sonora contundente

El perfil de sonido del BlackShark V2 Pro está claramente orientado a los videojuegos y a la música con fuerte presencia de graves. Explosiones, efectos ambientales y bandas sonoras cinematográficas se reproducen con una potencia que impresiona. Al mismo tiempo, las voces y diálogos mantienen una nitidez más que suficiente, incluso en títulos intensos como Final Fantasy VII Rebirth o Halo Infinite.

La compatibilidad con THX Spatial Audio, a través de Razer Synapse en PC, añade una capa de inmersión adicional en juegos competitivos. Aunque no todos los títulos aprovechan esta función de forma óptima, en los compatibles se aprecia una mejora en la localización espacial de los sonidos.

En cuanto a la calidad objetiva del sonido, obtiene una puntuación general de 3,9 sobre 5 en los tests MDAQS, con notas destacadas en inmersividad (4,3) y timbre (4,2).

Micrófono sobresaliente para gaming y videollamadas

Uno de los puntos más destacados de esta edición es su micrófono desmontable, que ha sido mejorado notablemente. La voz se transmite de forma clara, natural y con muy buena presencia, incluso en entornos con cierto ruido de fondo. Para quienes pasan tiempo en reuniones online, ya sea por trabajo o en partidas cooperativas, este micrófono es una de las mejores opciones en su rango de precio.

Además, Synapse permite ajustar parámetros como claridad vocal, cancelación de ruido, compresión y retorno de voz, lo que proporciona un nivel de personalización muy por encima de la media.

Autonomía muy por encima de la media

Otro gran avance es la autonomía, que alcanza las 55 horas reales de uso continuo en pruebas, más del doble que la versión anterior. Aunque no llega a las 70 horas prometidas por la marca, sigue siendo un resultado excelente. También se incluye una función de reposo automático tras 15 minutos de inactividad.

Conclusión: una actualización sólida para quienes priorizan comodidad, sonido y autonomía

Los Razer BlackShark V2 Pro son una opción sobresaliente dentro del segmento de los auriculares gaming inalámbricos por debajo de los 250 € (aproximadamente). Mejora de forma tangible sobre su predecesor, y aunque no es compatible con Xbox ni ofrece entrada analógica, sus puntos fuertes compensan ampliamente estas limitaciones.

Ideal para jugadores en PC, PS5 o Switch, y perfecto para quienes trabajan desde casa y necesitan una herramienta de comunicación cómoda y fiable, este modelo se consolida como uno de los más completos de su categoría.

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