Una nueva actualización de naves en Star Citizen ha reavivado las críticas de los jugadores que ven con preocupación el creciente modelo de monetización del título. El debate sobre el «pay to win» vuelve a tomar fuerza.
La controversia se centra en los nuevos kits “Blade”, disponibles ya en la tienda del juego. Estos paquetes ofrecen modificaciones específicas para ciertas naves de la serie Aegis, como el modelo Avenger Titan, el cual se puede adquirir por 62 dólares en su versión más económica.

Según la descripción oficial, estas mejoras —las TSB y PHB Flight Blades de Broad & Rabiee— permiten optimizar el rendimiento de la nave. La TSB redistribuye la propulsión lateral para alcanzar mayores velocidades en línea recta, mientras que la PHB mejora la precisión del manejo en maniobras cerradas al reajustar el empuje frontal.
Dicho de forma sencilla: estas actualizaciones de pago hacen que la nave sea más rápida y maniobrable en combate.
Aunque es cierto que en Star Citizen muchos objetos y mejoras terminan estando disponibles mediante la moneda del juego —y que estas exclusividades suelen ser temporales—, eso no ha detenido a la comunidad a la hora de denunciar el desequilibrio que introducen estas ventajas compradas con dinero real.
La polémica tampoco es nueva. En su estado de acceso anticipado y versión “Alpha”, el juego permite desbloquear naves de gran tamaño realizando “pledges” (aportes económicos), lo que garantiza su acceso permanente. Algunas de estas compras incluyen “seguro vitalicio”, reduciendo los costes de recuperación en caso de destrucción.
Las quejas han inundado tanto Reddit como los foros oficiales de Spectrum, donde muchos jugadores ven esto como el inicio de una tendencia preocupante: pagar por mejoras clave del rendimiento. Otros señalan que el propio sistema de compra de naves ya constituye una forma de pagar para ganar.
Esta actualización forma parte del evento Invictus Launch Week, que ofrece acceso gratuito a diversas naves y permite probar el juego sin necesidad de haber realizado una compra previa mediante un sistema de «Free Fly».