Borderlands 4 llega con la promesa de llevar la franquicia a nuevas alturas, y en muchos aspectos, lo logra. Con un mundo abierto vibrante, personajes jugables únicos y un arsenal de armas tan alocado como siempre, Gearbox ha creado una experiencia que captura el espíritu caótico y desenfadado de la saga. Sin embargo, los problemas técnicos y un endgame decepcionante impiden que este título alcance la grandeza absoluta. A continuación, desglosamos lo mejor y lo peor de esta nueva entrega.
Un universo renovado en Kairos
La historia de Borderlands 4 nos lleva a Kairos, un nuevo escenario que se siente como un soplo de aire fresco para la saga. Este mundo abierto, el primero de la serie en su forma más pura, es un acierto rotundo. Desde desiertos abrasadores hasta ciudades futuristas repletas de neón, Kairos está lleno de vida, detalles y secretos que invitan a la exploración. La nueva movilidad, con ganchos y mecánicas de planeo, encaja perfectamente con el espíritu dinámico de Borderlands, permitiendo a los jugadores desplazarse con fluidez mientras descubren cada rincón del mapa.
El tono humorístico, aunque sigue siendo marca de la casa, ha sido moderado con un equilibrio sorprendente, alejándose del humor forzado que a veces lastraba a Borderlands 3. Sin embargo, la narrativa principal no termina de cuajar. La trama cae en el cliché de «resistencia contra tiranía», y los nuevos personajes, aunque funcionales, son olvidables en comparación con los icónicos Vault Hunters de entregas anteriores. Afortunadamente, el regreso de algunos personajes clásicos del universo Borderlands aporta un toque de nostalgia que compensa en parte estas carencias.
Buscacámaras que roban el protagonismo
Los cuatro buscacámaras iniciales son, sin duda, uno de los puntos fuertes del juego. Cada uno ofrece un estilo de juego único y versátil, con árboles de habilidades profundos que permiten personalizarlos hasta el más mínimo detalle. Vex, la Sirena gótica, puede centrarse en mascotas, robo de vida o clones; Rafa, el Exo-Soldado, combina cuchillos y cañones con un carisma arrollador; Harlowe, el Gravitar, destaca por su control de masas y explosiones devastadoras; y Amon, un vikingo moderno, reparte hachazos y escudazos con un estilo brutal. La integración de estos personajes en la narrativa, con diálogos ingeniosos y una presencia constante en las cinemáticas, los hace sentir vivos y conectados con el mundo.
La campaña principal tiene una duración aproximada de 25 horas si vas directo al grano, pero los completistas pueden extenderla fácilmente a 50 horas o más gracias a las misiones secundarias, coleccionables y actividades opcionales. Estas últimas, en muchos casos, son más memorables que la propia historia principal, con un diseño que combina humor, creatividad y desafíos únicos. Sin embargo, si apuras la campaña sin dedicarte a las secundarias, llegarás al endgame por debajo del nivel recomendado, lo que obliga a completar algunas actividades adicionales para alcanzar el máximo potencial de tu personaje.
Un cooperativo de primera, con algún tropiezo
Borderlands 4 brilla en el modo cooperativo, manteniendo la esencia de la saga como un título ideal para disfrutar con amigos. Unirse a una partida es sencillo, el progreso se comparte sin complicaciones y puedes moverte libremente por el mapa siempre que estés en la misma zona. Sin embargo, algunos jugadores han reportado lag ocasional y retrasos en el registro de impactos, lo que puede entorpecer la experiencia en momentos clave. A pesar de estos inconvenientes, el cooperativo sigue siendo uno de los pilares más sólidos del juego.
Un mundo abierto que marca el camino a seguir
El salto al mundo abierto es, sin duda, uno de los mayores aciertos de Borderlands 4. Kairos no solo es visualmente espectacular, sino que está diseñado con un equilibrio perfecto entre libertad y dirección. Nunca te sientes abrumado por la cantidad de opciones, pero siempre hay algo interesante que descubrir, ya sea un cofre escondido, un enemigo único o una misión secundaria hilarante. Sin embargo, la experiencia no está exenta de fallos: las paredes invisibles y los callejones sin salida rompen ocasionalmente la inmersión, obligándote a seguir rutas predeterminadas.
Problemas técnicos que empañan la experiencia
El lanzamiento de Borderlands 4 no ha estado exento de controversia. Los problemas de optimización, especialmente en PC, incluyen caídas de frames, stuttering y un uso excesivo de CPU y GPU. Aunque las versiones de consola suelen ser más estables, también han presentado problemas, lo que es decepcionante para un título de esta magnitud. Si bien los gráficos son un paso adelante respecto a entregas anteriores, el costo en rendimiento parece desproporcionado en comparación con otros juegos modernos. Los jugadores con hardware más antiguo deberían ser especialmente cautelosos.
Un endgame que no está a la altura
El endgame, bautizado como «Modo Buscacámaras Definitivo», prometía desafíos variados y botín épico, pero se queda corto en su ejecución. En lugar de aprovechar el vasto mundo abierto, Gearbox opta por reciclar misiones de la campaña principal con modificadores que, en lugar de añadir profundidad, resultan tediosos y repetitivos. La idea de permitir a los jugadores crear personajes de nivel 30 para saltarse la campaña y acceder directamente al endgame era prometedora, pero se ve empañada por misiones «comodín» que obligan a rejugar secciones de la historia con diálogos y tareas que no aportan nada nuevo. Este enfoque contradice la propia filosofía del juego y frustra a los jugadores que buscan un endgame fresco y dinámico.
Conclusión
Borderlands 4 es una evolución vibrante para la saga, con un mundo abierto que redefine lo que un Borderlands puede ser, unos Vault Hunters carismáticos y un arsenal de armas tan creativo como siempre. El doblaje completo al español, con una calidad excepcional, y la variedad de misiones secundarias añaden un valor inmenso a la experiencia. Sin embargo, los problemas técnicos y un endgame decepcionante evitan que el juego alcance su máximo potencial. Para los fans de la saga y los amantes de los looter shooters, Borderlands 4 sigue siendo una recomendación sólida, pero no está exento de fallos que podrían pulirse en futuras actualizaciones.
Lo mejor:
- Mundo abierto variado y lleno de detalles.
- Vault Hunters únicos con árboles de habilidades profundos.
- Misiones secundarias creativas y memorables.
- Nueva movilidad con ganchos y planeo.
- Cooperativo fluido y divertido.
- Doblaje y traducción al español de gran calidad.
Lo peor:
- Endgame repetitivo y poco inspirado.
- Nuevos personajes de la historia poco memorables.
- Problemas de optimización en PC y consolas.
Nota final: 7,5/10
Borderlands 4 no es perfecto, pero su mundo abierto, su combate mejorado y su inconfundible estilo lo convierten en una experiencia que ningún fan de los looter shooters debería perderse. Con algunos parches y un endgame más robusto, podría haber sido un contendiente serio al trono del género.






